"Cualquier recurso a la guerra, a cualquier tipo de guerra, es un recurso a medios que son inherentemente criminales. Guerra, inevitablemente, es un curso de asesinatos, asaltos, privaciones de la libertad, destrucción de la propiedad.

"


Robert Jackson

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jueves, 29 de agosto de 2013

La criminalidad de la disuasión nuclear.

Por Francis Boyle

Agosto 6, 2013

Traducido por Luis J. Leaño.


La raza humana se encuentra al borde de la auto- extinción nuclear y con ello morirán la mayoría, sino todas las formas de vida inteligente en el planeta tierra. Cualquier intento por disipar la ideología del nuclearismo y del mito que le asiste, frente a la propuesta de la legalidad de las armas nucleares y de la disuasión nuclear, debe luchar a brazo partido con el hecho de que la era nuclear fue concebida en el pecado original de Hiroshima y Nagasaki, en Agosto 6 y 9 de 1945.


Los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki contituyeron crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra de acuerdo a la definición de la Carta de Núremberg de Agosto 8 de 1945, y violaron varias provisiones básicas de las Regulaciones agregadas a la Convención de la Haya No. 4, respecto de la Leyes y Costumbres de la Guerra en tierra (1907), las normas del derecho internacional consuetudinario enunciadas en el proyecto de Reglas de la Haya sobre combate aéreo (1923), y en el manual de campo del Departamento de Guerra de los Estados Unidos 27-10, reglas relacionadas con la guerra en tierra (1940). De acuerdo con este manual de campo y con los principios de Núremberg, todos los funcionarios y oficiales militares del gobierno civil que ordenaron o concientemente participaron en el bombardeo atómico de Hiroshima y Nagasaki podrían haber sido sancionados penalmente como criminales de guerra.  Cualquier progreso hacia la resolución del predicamento nuclear de la humanidad debe provenir del reconocimiento de que las armas nucleares nunca han sido instrumentos legítimos de una política de Estado, sino que por el contrario siembre han constituído instrumentos ilegítimos de anarquía internacional y comportamiento criminal. 

El uso de armas nucleares.


El uso de armas nucleares en combate fue, y todavía lo es, absolutamente prohibido bajo toda circunstancia de acuerdo al derecho internacional convencional y consuetudinario. Por ejemplo, , los principios de Núremberg, las regulaciones de La Haya de 1907, la Convención Internacional para la prevención y sanción del crimen de genocidio de 1948, la cuarta convención de Ginebra de 1949 y su protocolo adicional de 1977, etc. Adicionalmente, el uso de armas nucleares podría tambien violar específicamente varias resoluciones fundamentales de la Asamblea General de la ONU que han condenado repetidamente el uso de armas nucleares como un crimen internacional. 


En consecuencia, de acuerdo con el criterio de Núremberg, los soldados estarían obligados a desobedecer órdenes notoriamente ilegales respecto de lanzar y emprender una guerra nuclear. En segundo lugar, todos los funcionarios gubernamentales y los oficiales militares que sin embargo emprendiera una guerra nuclear, podrían ser personalmente responsables  por la comisión de crímenes contra la paz, crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra, graves violaciones a las convenciones de Ginebra y al protocolo 1, y genocidio, entre otros crímenes internacionales. En tercer lugar, tales individuos no podrían arguir la defensa de las órdenes superiores, actos de Estado, tu quoque, legítima defensa, autoridad presidencial, etc.  En cuarto lugar, tales individuos podrían así de manera legítima ser severamente castigados como criminales de guerra, hasta con la pena de muerte, sin limitación del tiempo. 

La amenaza del uso de armas nucleares.


El Article 2(4)  de la Carta de las Naciones Unidas prohibe la amenaza y el uso de fuerza excepto en casos de legítima defensa, tal y como se reconoce en el artículo 51 de la misma.  Pero aunque el requerimiento  de la legítima defensa es una pre- condición necesaria para la legalidad de cualquier amenaza o uso de la fuerza, esta no es ciertamente suficiente. La legalidad de cualquier amenaza o uso de fuerza debe considerar el derecho internacional consuetudinario y convencional relacionado con el conflicto armado humanitario. 


En consecuencia, la amenaza de uso de armas nucleares (disuasión nuclear, terrorismo), constituye una actividad criminal internacional en curso; a saber, planeación, preparación, invitación y conspiración para cometer crímenes contra la paz, crímenes contra la humanidad, crímenes de guerra, genocidio y graves violaciones de la Cuarta Convención de Ginebra de 1949, el protocolo adicional I de 1977, las regulaciones de La Haya de 1907, y la Convención Internacional para la prevención castigo del crímen de genocidio de 1948, entre otros. Estos son los llamados crímenes rudimentarios que bajo los principios de Núremberg constituyen delitos internacionales por derecho propio.


La conclusión es inexorable: el diseño, investigación, prueba, producción, manufactura, fabricación, transporte, despliegue, instalación, mantenimiento, almacenamiento, venta y compra, al igual que la amenaza de usar armas nucleares con todos sus accesorios esenciales, son delito bajo los bien reconocidos principios de derecho internacional. Así, aquellos en el gobierno con poder de decisión sobre las armas nucleares, con responsabilidad de comando sobre sus instalaciones, están sujetos a responsabilidad penal personal bajo los principios de Núremberg por su práctica criminal de disuasión y terrorismo nuclear, que diariamente han infligido sobre todos los Estados y personas de la comunidad internacional.  Quisiera destacar cuatro componentes de la amenaza de uso de armas nucleares que son especialmente censurables desde una perspectiva de derecho internacional: dirigido contra una étnia; dirigido contra una ciudad; armas de ataque inicial y planes de contingencia; y uso inicial de armas nucleares, inclusive para repeler un ataque inicial. 

La criminalidad de las armas nucleares y de la disuasión nuclear.


Como puede ser determinado en parte del análisis precedente, las instalaciones de armas nucleares de hoy, así como todo el sistema de disuasión /terrorismo nuclear practicado por todos los Estados con capacidad nuclear, es criminal; no simplemente ilegal, no simplemente inmoral, sino criminal bajo los bien establecidos principios de derecho internacional. La simple idea de la criminalidad de las armas nucleares puede ser utilizado para penetrar a través de la ideología del nuclearismo a la cual muchos ciudadanos en los Estados con capacidad nuclear han sucumbido.  Con la simple idea de la criminalidad de las armas nucleares, esos ciudadanos preocupados pueden entender la ilegitimidad inherente y el desorden fundamental de las políticas que sus gobiernos persiguen en su nombre, con respecto al mantenimiento y futuro desarrollo de los sistemas nucleares. 

La conspiración criminal internacional de la disuasión/ terrorismo nuclear.


La humanidad debe abolir las armas nucleares antes de que las armas nucleares puedan abolir a la humanidad. No obstante, un pequeño número de gobiernos en la comunidad mundial continúan manteniendo sistemas de armas nucleares a pesar de las normas de derecho penal internacional. Esto ha llevado a algunos abogados internacionalistas a arguir  repetida y falsamente que en la medida en que existan algunos Estados en el mundo con armas nucleares, ellas no tendrían una connotación criminal porque de otra manera esos Estados no las tendrían. En otras palabras, para usar el discurso de los abogados, esa práctica (disuasión/ terrorismo nuclear de los grandes poderes) de una minoría de Estados, de alguna manera niega la existencia de una opinión jurídica mundial (ej: sentido de obligación legal), y la criminalidad de las armas nucleares. 


Hay una respuesta simple a ese argumento engañoso: Desde cuándo una pequeña banda de criminales -en este caso, los Estados con capacidad armamentista nuclear- pueden determinar lo que es legal o ilegal por el resto de la comunidad?  Qué derecho tienen esos Estados para arguir, cuando intentan convertir su propio comportamiento criminal en actos legítimos?  Ninguna nación civilizada permitiría a una pequeña banda de conspiradores pervertir su orden legal doméstico de esta manera. Además, los tribunales de Núremberg y Tokio señalaron claramente que una banda conspiradora de Estados criminales seguramente no tenía el derecho de excluir el orden legal internacional invocando su propio comportamiento criminal como común denominador de conducta internacional. Ex iniuria ius non oritur es una norma perentoria de derecho internacional consuetudinario. El derecho no puede surgir de la injusticia!


Al contrario, la raza humana entera ha sido victimizada por una conspiración internacional de actividad criminal en marcha llevada a cabo por Estados con capacidad armamentista nuclear bajo la doctrina conocida como "disuasión nuclear", que realmente es un eufemismo de "terrorismo nuclear".  Esta conspiración criminal internacional no es diferente de cualquier otra conspiración realizada por una banda criminal.  Ellos son bandidos.  De esta manera, depende del resto de la comunidad internacional reprimir y disolver esta conspiración criminal internacional tan pronto como sea posible. 

El derecho humano a la resistencia civil anti- nuclear. 


A la luz del hecho de que los sistemas de armas nucleares están prohibidos, son ilegales y criminales bajo todas las circunstancias y por cualquier razón, cada persona alrededor del mundo posee el derecho humano básico de permanecer libre de está práctica ilegal de la disuasión/ terrorismo nuclear y su espectro concomitante de la extinción nuclear. 


Así, todos los seres humanos poseen el derecho básico bajo la ley internacional de participar en una resistencia civil no violenta con el propósito de prevenir, impedir o terminar con la comisión de estos crímenes internacionales. Cada ciudadano de la comunidad mundial tiene el derecho y el deber de oponerse a la existencia de sistemas de armas nucleares por cualquier medio no violento que esté a su disposición. De otra manera, la raza humana sufrirá el mismo destino de los dinosaurios y el planeta tierra se convertirá en un desierto radioactivo.  El momento para una acción preventiva es ahora! 

El contenido original de artículo anterior puede revisarse en el siguiente enlace:
http://mwcnews.net/focus/analysis/29428-nuclear-deterrence.html

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